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Psicología sistémica

Psicología Sistémica

La psicología sistémica estudia los factores que intervienen dentro del proceso de interacción entre las personas. Es una especie de análisis de las relaciones humanas, por lo que es posible interpretar las relaciones de pareja, familiares y laborales.

Cada individuo se relaciona de manera distinta con su entorno. De ahí los principios que rigen a la psicología sistémica para aplicarla a las personas de manera individual o grupal, así como dentro de los equipos de trabajo. 

¿Qué es la psicología sistémica?

Esta es una nueva forma de hacer psicología, ya que se estudia el individuo dentro de un todo

La psicología sistémica se encarga de interpretar los sistemas que se generan dentro de las relaciones de un grupo, puesto que la comunicación se presenta de diferentes formas. Además, se estudian los movimientos de cualquier individuo. Esto beneficia el sistema, ya sea de forma consciente o inconsciente.

En el caso de que el sistema sea disfuncional, alguno de los miembros dejará ver un síntoma, lo que facilitará el estudio de los factores. De forma natural, el sistema se resiste al cambio. Por eso, el enfoque de este tipo de psicología se centra en que todo cambio dentro del sistema genera un efecto positivo.

La psicología sistémica no es más que el dinamismo de las interrelaciones del ser humano, así como de los sistemas a los que el individuo pertenece. También estudia los procesos comunicacionales y las interacciones entre los miembros de un sistema.

Los beneficios de la psicología sistémica son múltiples. Los cambios en el individuo permiten la autorrealización, la afiliación, el reconocimiento, la seguridad, el orden y el equilibrio.

Orígenes de la psicología sistémica

La psicología sistémica tiene sus orígenes en la teoría General de Sistemas de Karl Ludwig von Bertalanffy, el cual empezó a desarrollarse a mediados del siglo XX. Esta teoría estudia la comunicación y las interacciones humanas dentro de un sistema global.

Muchos conflictos emocionales se originan dentro de la socialización. Por eso, esta psicología analiza los problemas como un todo. Se enfoca en comprender y modificar las dinámicas y movimientos en las relaciones interpersonales.

También se asocia a la psicología sistémica el aporte de Gregory Bateson. Este es un antropólogo que junto a sus investigadores proponen analizar el sistema de comunicación en las familias que tienen miembros con esquizofrenia.

En este sentido, la terapia se empezó aplicar en los hogares que convivían con una persona enferma o con una psicopatología complicada. También trabajaron con pacientes que presentaban otros problemas psicológicos.

La teoría del doble vínculo

Después de las investigaciones de Bateson surge la teoría del doble vínculo. Este es un dilema comunicativo que se presenta por la contradicción entre dos o más mensajes. Es decir, cuando las personas se envían mensajes que se contradicen entre sí.

El fenómeno de la comunicación humana es uno de los principales análisis de la terapia sistémica. 

También se asocian a esta corriente los aportes de Paul Watzlawick a través de la teoría de la comunicación humana. En este aspecto, se abordan las problemáticas vinculadas a la pragmática de la comunicación. Estas están basadas en los efectos que la comunicación ejerce sobre la conducta.

Psicología sistémica: teoría del vínculo

¿En qué se basa la psicología sistémica?

Con el paso del tiempo se ha comprobado la efectividad de la terapia sistémica. Por eso, es necesario que conozcas los principios básicos y relevantes de este tipo de psicología:

Análisis del sistema como un todo

Para esta psicología, el sistema es considerado un todo donde la globalidad es mayor que la suma de sus partes. De esta forma, la psicología sistémica se enfoca en las propiedades del todo, las cuales resultan de la interacción entre los diferentes elementos que actúan dentro de un sistema. 

Cuando se habla de sistemas se refiere al estudio de la pareja, familia, amigos o compañeros de trabajo. En este sentido, se estudia justamente la forma como se relacionan en un marco contextual. La psicología sistémica centra su interés en los roles y los comportamientos de los individuos en contextos determinados y con reglas tácitas de ese sistema.

Principio multicausal

Esta psicología surge desde una perspectiva circular y multicausal. Por lo tanto, no existen marcadores lineales, en los cuales haya una única causa. Al contrario, hay varios factores causales determinantes. Es decir, cada acción y reacción cambia permanentemente la naturaleza del contexto.

Por ejemplo, en una familia cada individuo reacciona de manera distinta ante un mismo hecho. Esto modifica la situación final, que está condicionada por la combinación de las diversas reacciones del grupo familiar.

Paul Watzlawick fue pionero en descubrir esta causalidad circular de los acontecimientos, lo que explica las posibles pautas repetitivas de las interacciones entre los individuos. De esta manera, la visión circular de los problemas está basada en la forma en que el comportamiento de un individuo influye en las acciones de las demás personas. 

Cada sistema tiene reglas que el terapeuta sistémico conocerá para intervenir sobre las que son inadecuadas. La forma de comunicarse es clave para esta corriente y determina el mantenimiento o la reducción del problema a tratar.